El conjunto de Troglio no comenzó bien en el Bosque. Emparchado por todos lados y sufriendo además la lesión de Alvaro Fernández cuando promediaba el primer tiempo, los de Troglio pudieron enderezar una historia que había arrancado bastante torcida.
Cuando el cotejo recién se armaba, Matías Garrido ejecutó un tiro libre bajo por afuera de la barrera (mal armada) y colocó el balón contra el caño izquierdo de Ricardo Bologna para abrir el marcador a los 10 minutos. Todo era desconcierto en el mens sana.
A los 12, Comas enfrentó mano a mano al arquero albiazul pero definió mal contra su cuerpo y por eso la visita no amplió el resultado y mantenía al Tripero con vida. Y esa vida se la cobró en la primera chance que tuvo para marcar el empate. Matías Noble tiró un centro preciso desde la derecha que cayó en la cabeza de Franco Niell, que con un certero golpe con el parietal izquierdo volvió al gol en el Bosque.
El primer tiempo terminó mostrando a Gimnasia un poco mejor que su rival, pero los primeros 15 minutos preocuparon y bastante al cuerpo técnico albiazul.
Pero ese segundo tramo del primer tiempo se prolongó en el inicio del complemento. Porque apenas comenzado este acto tras una buena jugada de Niell y un rebote después de un disparo de Castillón, apareció Faravelli para romper el arco de la visita y marcar el 2-1 a los 20 segundos.
Tuvo el tercero Gimnasia luego de un desborde de Bou y un centro atrás que Geminiani sacó en la línea antes de que llegara Noble. Y en la réplica llegó el empate del visitante. Otra vez Garrido iba a anotarse en la red cuando a los 22 minutos sacó provecho de un rebote que quedó boyando en el área y ante el desconcierto defensivo albiazul, ajustició a Bologna.
Pero el conjunto de Troglio tenía una mejor cara del medio hacia adelante y lo iba a demostrar a los 29 minutos cuando Franco Niell, el mejor del triperaje, jugara un centro preciso para Walter Bou, quien debutó en la red con un lindo cabezazo.
Sobre el final del juego, el Patrón se quedaría con diez por la expulsión de Geminiani, pero no por eso el Lobo dejaría de sufrir hasta el final.
