Sentada en el sillón de No es tan tarde, la autora de “Guión” compartió algunas de las costumbres más raras que tiene junto a su pareja.
Luciano Castro y Flor Vigna llevan varios meses juntos y, en ese tiempo, compartieron con la audiencia algunos de los detalles más llamativos de su relación, según publicó La Nación.
A diferencia de otras parejas, nunca trataron su vínculo de manera hermética, todo lo contrario: tanto en las redes como en los medios se mostraron muy dispuestos a dejar relucir cómo son en la intimidad. La visita de la ex Combate a No es tan tarde (Telefe) no fue la excepción y, durante la descontracturada entrevista, reveló algunas de las costumbres más extrañas que mantiene junto al actor.
A pesar de que a lo largo de una década Castro prefirió mantener su vida privada alejada de los medios, tras su separación de Sabrina Rojas y con el comienzo de una nueva relación, su actitud cambió por completo. No solo utiliza cada vez más sus propias redes sociales sino que no tiene problema de aparecer de manera cotidiana en el perfil de Flor Vigna, quien se destaca como influencer. Muestran sus paseos en auto, las rutinas de ejercicios que hacen juntos y sus momentos más acaramelados y cómplices. Todo queda registrado con la cámara del celular.
En cuanto a las entrevistas, la situación no es muy diferente. Ninguno de los artistas tiene problema en presumir su lado más enamorado y, durante los últimos meses, le contaron al interesado público desde los apodos que se pusieron en la intimidad hasta un par de detalles de su vida sexual. En la noche del jueves, la bicampeona del Bailando sumó más datos sobre su vida privada al explicar una extraña costumbre que tiene a la hora de dormir con Castro.
“¿Por qué se llevan con Luciano Castro todas las noches seis litros de agua a la cama?”, preguntó German Paoloski, conductor del ciclo nocturno. Entre risas y sin una pizca de vergüenza, ella admitió que era verdad y se dispuso a dar una explicación. “Sí, pasa eso y es mi culpa. Primero guardo todas las botellas de vino y cervezas que están en mi casa y las relleno con agua del filtro porque no quiero gastar en agua. Tomo mucha agua y, por ende, meo mucho también”, detalló.
Aún más intrigado por esa particular respuesta, el entrevistador volvió a insistir. “Pero ¿por qué tomás tanta agua?”, quiso saber. “Una vez me quedé afónica y no pude hablar por una semana. Estaba haciendo teatro de jueves a domingo y me tuvieron que pichicatear porque me dijeron ‘todo bien con que estés muda pero hay que hacer teatro, la sala está llena’. Y de ahí me quedé muy traumada con que me tengo que hidratar. Me quedó como un tic con eso y toma mucha agua”, manifestó Vigna.
