Es la mentada ‘bicicleta financiera’. Un informe señala que empresas de diversos rubros estiran sus pagos hasta donde pueden, pero los plazos se acortan por temor a un quiebre en la cadena de pagos .
«Es una rueda: si a vos te lo hacen, vos lo tenés que hacer también. De lo contrario, no hay cash para cubrir la cuenta bancaria», confiesa un ejecutivo de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa.
La falta de efectivo en la calle hace que la compra y venta de productos y servicios se pague con el mayor plazo posible, aunque cada vez los tiempos se acortan más.
«Si hoy alguien te acepta un cheque a 45 días, dale un abrazo grande, porque te hace un favor enorme?», contó al diario El Cronista, Vicente Lourenzo, secretario de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
Según un informe de ese periódico, las empresas del rubro textil, indumentaria, ropa de cama, calzado de hombre y de mujer, que en 2011 le pagaban al fabricante con cheques a 30, 60 y hasta 90 días para algunos artículos fuera de temporada, hoy deben hacerlo a 15 y 30 días para que les entreguen la mercadería.
Lo mismo ocurre, indica el artículo, en las empresas de servicios al cliente, donde se trata de bicicletear el pago al máximo, para poder alargar los plazos y así ganar poder adquisitivo. Priorizan la compra de mercadería, para poder tener stock, que al comprar al contado se obtiene un mejor precio.
Gustavo Frencheli es director general de Caja de Pagos, una empresa que atiende las cobranzas de 300 pymes de consumo masivo, venta directa, indumentaria y calzado.
Frencheli asegura que “los primeros cinco días del mes es cuando más se vende de todo, en especial las revendedoras de cosméticos”.
Sucede que, ante el aumento de la morosidad, las empresas de servicios se esfuerzan por mandar las facturas el día 1, cuando hace un año lo hacían recién el día 5. Y ofrecen un pago abierto: el cliente puede ir a un Pago Fácil y depositar la plata que tenga en el momento. Por ejemplo, si tiene que pagar una factura de $200, puede ir con sólo $100, y a los diez días llevar los $100 restantes, sin importar el vencimiento. Es una alternativa que se está empezando a usar cada día más, porque la gente muchas veces no puede reunir todo el dinero junto.
