Durante las últimas semanas, aumentaron los contagios de moquillo, una enfermedad viral que afecta a los perros y que puede provocar daños graves en su sistema nervioso. Veterinarios advierten que esta variante es especialmente agresiva y que, en muchos casos, la enfermedad termina con la eutanasia de los animales afectados.
El veterinario Joaquín García subrayó que durante el invierno es crucial que los perros estén protegidos con la vacuna contra el moquillo, conocida como vacuna quíntuple. Esta vacuna es fundamental en el contexto actual, ya que “estamos en una epidemia de moquillo como hace muchísimos años no había” dijo a Crónica.
Características de la cepa actual y síntomas neurológicos
García explicó que la cepa que circula tiene una alta predilección por atacar el sistema nervioso, provocando síntomas como tics, convulsiones y mioclonías, movimientos bruscos involuntarios que suelen ser irreversibles una vez que se manifiestan. Por ello, insistió en la importancia de la vacunación anual para prevenir la enfermedad.
El veterinario señaló que en los últimos meses han atendido un número inusualmente alto de casos, una situación que también se replica entre sus colegas: “Ya nos habíamos olvidado casi del moquillo, porque siempre hay, pero son pocos los casos. Ahora la cantidad es terrible”.
En cuanto al origen del brote, el veterinario señaló que “por ahí se ha fallado en la vacunación. La gente siempre vacunó o va tomando conciencia, pero acá tenemos un problema porque hay muchos perros callejeros que van manteniendo la virosis de un perro a otro, y puede ser una de las causas”.
Aunque no existen estadísticas oficiales, García mencionó que desde el mes pasado la cantidad de casos se ha mantenido alta, con un leve descenso en junio, pero la cepa sigue siendo preocupante por su rapidez para afectar el sistema nervioso.
A diferencia del moquillo clásico, que inicia con síntomas respiratorios o digestivos, esta variante comienza con conjuntivitis y rápidamente ataca el sistema nervioso, mostrando una agresividad inusual.
Vacunación: la mejor defensa contra el moquillo
El especialista concluyó que, aunque algunos perros que desarrollan síntomas nerviosos pueden sobrevivir con secuelas, otros deben ser sacrificados por la falta de mejoría.
Sin embargo, si se detecta y trata a tiempo, un porcentaje importante puede salvarse. Por ello, la vacunación es la medida preventiva más eficaz, ya que “si se vacuna ya tiene las defensas y no se enferma”.
