La vicepresidenta y presidenta del Senado, Victoria Villarruel, rompió el silencio en medio de la crisis política generada por la difusión de audios que mencionan presuntos sobornos en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS). Consultada por la prensa, se limitó a reconocer: “Es un momento difícil y confuso”, aunque no dio precisiones sobre la denuncia ni sobre el rol de los funcionarios mencionados.
Las grabaciones, difundidas por el exdirector de la ANDIS, Diego Spagnuolo, señalan la existencia de una supuesta red de recaudación ilegal que alcanzaría cifras millonarias y que involucraría a figuras cercanas al presidente Javier Milei, entre ellas su hermana Karina Milei y el subsecretario Eduardo “Lule” Menem. La justicia ya inició allanamientos y avanza con una investigación que podría escalar en los próximos días.
Villarruel, en tanto, se mostró públicamente en Chubut, donde participó de un acto por los 90 años de Río Mayo junto al gobernador Ignacio Torres. Durante el encuentro, evitó hacer nuevos comentarios sobre el escándalo y centró su discurso en destacar su vínculo con la región y la importancia del federalismo, reafirmando su identidad como “chubutense por adopción”.
El oficialismo atraviesa así una de las crisis más delicadas desde la llegada de Milei al poder. La falta de respuestas claras desde la Casa Rosada, sumada al silencio de Karina Milei y a las breves palabras de la vicepresidenta, alimenta el clima de incertidumbre en un escenario donde la promesa de “lucha contra la casta” choca con acusaciones de corrupción dentro del propio Gobierno.
