La primera Asamblea General Ordinaria y Especial de Accionistas de YPF comenzó poco después de las 11 en la sede central de la empresa. La reunión dará marco a la asunción formal de Miguel Galuccio como gerente de la empresa.
Preside la asamblea el titular de la Comisión Nacional de Valores (CNV), Alejandro Vanoli, y en la puerta del edificio un grupo de ex trabajadores de YPF solicitan ser considerados en el Programa de Propiedad Participada (PPP), que se estableció durante la privatización.
En el encuentro también se discute la remoción de miembros titulares y suplentes de ambos órganos sociales y se procederá a la votación de los candidatos propuestos por el Estado Nacional, titular de las acciones de clase A y por los accionistas privados titulares de acciones de clase D.
El viernes pasado, el ministro de Planificación, Julio de Vido, y el viceministro de Economía, Axel Kicillof, presentaron un trabajo -denominado «Informe Mosconi»- que da cuenta de la estrategia llevada adelante por Repsol para vaciar a YPF.
«La desinversión de Repsol era absoluta y por suerte, a partir de la decisión impulsada por la presidente Cristina Fernández , aumentamos 4,2 por ciento la producción de petróleo, y 10,2 por ciento la de gas», señaló De Vido.
Kicillof, por su parte, dijo que «queda una YPF de una potencialidad enorme, aún con toda la destrucción que le hicieron, sin explorar, sin invertir, dejando caer las reservas y endeudándose para cancelar la deuda rápidamente y luego girar utilidades al exterior».
En abril pasado, la presidente anunció la decisión de expropiar el 51 por ciento de las acciones de YPF en manos de Repsol a través del envío al Congreso de un proyecto de ley que declara de «interés público» a la producción hidrocarburífera.
