En 1929, comenzaba un trabajo que cambiaría para siempre el paisaje de Comodoro. El Chenque Chico, un antiguo cerro ubicado en la manzana delimitada por las calles Rivadavia, Belgrano, Ameghino y Mitre, empezó a ser desmontado.
Ese mismo lugar, donde hoy se encuentra el edificio del Comando del Ejército, fue testigo de una transformación profunda que marcaría el crecimiento urbano de la ciudad.
El Chenque Chico tuvo un papel fundamental en los inicios de Comodoro. El material extraído de este cerro fue utilizado para rellenar terrenos ganados al mar y para la construcción de nuevas obras urbanas, particularmente en la zona costera y en barrios que hoy forman parte esencial de la ciudad. Así, el Chenque Chico ayudó a moldear físicamente la expansión de Comodoro.
Una fotografía histórica conservada en el Archivo Histórico Municipal capta el momento en que la sombra del Chenque Chico se proyecta sobre la placa de maniobras del ferrocarril, un espacio que años después se convertiría en la terminal de ómnibus.
