na expedición del CONICET que recorre el lecho marino en la provincia de Buenos Aires, específicamente en un cañón submarino frente a Mar del Plata, trabaja con tecnología de punta para estudiar la biodiversidad y las condiciones del fondo oceánico a profundidades de hasta 3,900 metros.
Esta misión, que se transmite en vivo por YouTube, utiliza un vehículo operado remotamente llamado SuBastian, que es la primera vez que se emplea en aguas argentinas. Hasta el 10 de agosto continúan explorando esta zona, con imágenes en ultra alta definición que muestran especies sorprendentes y poco conocidas.

Según ADNSUR, en octubre, la expedición se trasladará a la Patagonia, donde un grupo de investigadores explorará dos cañones submarinos ubicados en el talud continental del Atlántico Sur, a cientos de kilómetros de Viedma y Rawson, zonas poco exploradas hasta ahora pero clave para entender las conexiones entre el océano profundo y la plataforma continental.
El objetivo es determinar si estos cañones funcionan como corredores de corrientes frías y ricas en nutrientes hacia zonas superficiales y cómo afecta esto a la vida marina y a los ecosistemas profundos.

El proyecto cuenta con tecnología avanzada como vehículos operados remotamente, ecosondas, boyas, sensores meteorológicos, redes para colectar plancton, botellas especiales para tomar muestras de agua, perfiladores para medir temperatura, salinidad y oxígeno, además de plataformas que se colocarán en el fondo marino para registrar datos en silencio.
