El Gobernador Martín Buzzi se reunió con los flamantes directivos del mismo. Durante la reunión, sus autoridades se pusieron a disposición del mandatario provincial para el trabajo conjunto.
Buzzi recibió en su despacho de Casa de Gobierno a integrantes del directorio del Colegio de Abogados de Comodoro Rivadavia. La comitiva fue encabezada por su presidente, Jorge Echelini, junto a Nélida Escribano, vicepresidente, Carlos Ness y Javier Mosquera, tesorero y primer vocal, respectivamente.
Al término del encuentro con el Gobernador, Echelini señaló que “en principio, nos presentamos como nuevas autoridades del Colegio de Abogados de Comodoro Rivadavia, y nos pusimos a disposición para que nos convoque a aportar en desde nuestra profesión, en todo lo que tiene que ver con el análisis de los códigos, y fuertemente, en la inseguridad que tanto inquieta a nuestra ciudad, que tiene un alto índice de inseguridad; ofrecimos al gobernador la capacidad que tiene nuestra matrícula para trabajar en conjunto en cualquier proyecto en el que nos quiera convocar”, y resaltó que “el colegio de abogados es un ámbito del pensamiento, donde no todos pensamos igual, y nos ofrecemos a trabajar porque estamos insertos en la comunidad, con los mismos padecimientos, más de quinientos abogados matriculados ejerciendo la profesión”.
El presidente del Colegio de Abogados de Comodoro Rivadavia destacó además que “gran parte de la charla se dedicó a analizar la situación de Comodoro Rivadavia, del Poder Judicial provincial, que en particular hoy en día, como se sabe atraviesa conflictividad interna vinculada a paros dispuestos por el personal, sobre todo para informarnos sobre cuál es la postura del gobierno en este aspecto”.
Más adelante, consignó que “estuvimos hablando sobre los códigos procesales, y en particular el código procesal penal, sobre el cual tenemos una lectura particular que quizás para algunos sea antipática y que no todos comparten, porque si bien el código es excelente, muy moderno, tal vez no es para nuestra sociedad y esto ha generado problemas; esto es una falta de aceptación del modelo por la comunidad, por lo menos en la medida que la comunidad denuncia por parte de esta herramienta, y no es novedad que si la herramienta no sirve para solucionar los problemas de la comunidad, entonces hay que cambiar la herramienta, ”, aseguró.
Sobre los posibles cambios a instrumentar en la legislación, Echelini puntualizó que “no se puede volver atrás en política criminal, pero sí entendemos que este código se debe matizar en algunos aspectos, nosotros no creemos que la justicia es endeble. El nuevo código tiene fortalezas como la inmediatez en la resolución, donde aseguraría que un caso tenga una resolución pronta, rápida, para el imputado. Antes demoraba tres, cuatro años. Y como debilidad, lo que reclama la comunidad cuando se investiga a alguien por delitos muy graves. Ese alguien sigue inserto en la comunidad, donde no sólo entorpece la investigación sino que el mensaje social, el mensaje hacia la comunidad, sociológicamente es el ‘todo vale’”, y opinó “no coincido con aquellos que afirman que volver a aplicar herramientas del viejo código signifique violar tratados internacionales de Derechos Humanos, todos estaban y siguen vigentes en el país”.
