Mark David Chapman, que de sus 55 años de edad lleva 30 en prisión por asesinar al ex beatle John Lennon confesó en las últimas horas que el famosísimo músico británico no era su objetivo principal.
Chapman solo buscaba la fama a través de un magnicidio, «y John Lennon parecía la víctima más accesible», señaló Chapman.
El asesino de Lennon, que antes del asesinato pasaba por un estado depresivo, pero que tras ver una película, cuyo título dice no recordar, cambió la idea del suicidio por la del asesinato.
Entonces planeó acabar con la vida de una celebridad con el fin de conseguir fama mundial. Entre sus posibles víctimas contemplaba a la actriz Liz Taylor, el cómico y presentador televisivo Johnny Carson, o Jackie Onassis, viuda del presidente Kennedy, y si se decidió por John Lennon fue únicamente por la facilidad del asesinato.
Actualmente Chapman declara que el asesinato le ha convertido en un persona infame en lugar del hombre famoso al que aspiraba ser.
Tampoco dice considerarse nadie especial, ya que se limitó a apretar un gatillo, algo que según él puede hacer cualquier persona corriente.
Estas confesiones tuvieron lugar durante la séptima entrevista de Chapman para acceder a la libertad condicional, que le fue nuevamente negada.
El asesino dice comprender su delito y que acatará la condena que se crea oportuna aunque esta sea de por vida. Chapman no podrá volver a pedir la condicional hasta el año 2012.
(Jornada)