Hoy se conocerá el IPC de agosto, que se acercaría al 7% y al 76% en la medición interanual. El equipo económico buscará profundizar las señales de ordenamiento fiscal y la suba de tasas de interés para lograr que el índice de precios se desacelere y ronde el 5% mensual en el último trimestre del 2002.
Previendo que la resignación de los datos de inflación de agosto y septiembre se ubicarían por encima del 6%, el equipo económico intentará profundizar las señales de ordenamiento fiscal y la suba de las tasas de interés, para lograr que el índice de precios se desacelere y se mantenga en 5% mensual en el último trimestre del corriente año.
Antes de que baje el IPC, las autoridades económicas esperan que se reduzca más la brecha cambiaria. Un primer paso sería colocarla en el 70%, tal como se ubicaba en los meses previos a la crisis, un nivel muy alto y todavía distorsivo, pero alcanzable como transición de cara al 2023, según publica Infobae.
El Indec, dará a conocer por fin el dato de la inflación de agosto, que rondaría el 7%. Motivo por el cual, habría acumulado cerca del 76% en el último año, el segundo índice más alto de América Latina detrás de Venezuela.
Según explicó el ministro Sergio Massa, frente a la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, se buscará mantener una serie de condiciones para estabilizar la economía, tal como lo expresó Janet Yellen en reunión con el ministro argentino.
Sobre esto, una fuente del Departamento del Tesoro aseguró que tras el encuentro, ‘’la Secretaria Yellen se presentó en una reunión con el Ministro de Economía de Argentina, Sergio Massa, en el Departamento del Tesoro. La Secretaria alentó al Ministro a implementar las reformas necesarias para reconstruir la credibilidad, estabilizar los mercados y sentar las bases para un crecimiento sostenible’’.
De esta manera, los pilares serían:
Mantener el ajusto fiscal, con más recortes “quirúrgicos” sobre el gasto público y también con la presión tributaria en alto por el anticipo extraordinario de Ganancias y la presión de la Aduana sobre maniobras fraudulentas del comercio exterior. En un futuro, quedaría la implementación del acuerdo entre la AFIP y la IRS, su par norteamericano, para lograr un intercambio automático de información fiscal que ayudaría a dar una lucha más efectiva contra la evasión.
Si bien no se logró llevar el acuerdo técnico a un plano político, el FMI destacó el esfuerzo del Gobierno en este sentido y en Economía creen que podría implementarse en 2023 una vez que se rubrique el pacto entre ambas cancillerías. No hubo declaraciones por parte del Tesoro al respecto.
Por esta razón, Massa le reiteró a Georgieva que cumplirá con las metas de déficit fiscal del 2,5% del PBI para este año y del 1,9% para el próximo, como reza el acuerdo firmado en marzo pasado. Esta búsqueda de la “consolidación fiscal” se reflejará en el presupuesto 2023 que Massa presentará el jueves al Congreso de la Nación.
Profundizar la política de acumulación de las reservas internacionales del Banco Central: el equipo económico cree que, una vez lograda la liquidación de USD 5000 millones del agro comprometida para este mes, el Gobierno podrá despejar todavía más las expectativas de una fuerte devaluación del tipo de cambio oficial y por lo tanto colaborar con una menor presión inflacionaria.
En relación a esto, los funcionarios entienden que se podrá mantener un saldo positivo para seguir acumulando reservas luego de que a fin de mes se termine el nuevo “dólar soja”.
Frente a los rumores sobre la posibilidad de extenderlo más allá de septiembre –descartada en on the récord por el secretario de Agricultura, Juan José Bahillo- el equipo económico cree que sería una mala señal en términos cambiarios y productivos.
Por ello, destacan que la emisión monetaria generada por este esquema transitorio será “controlable”, tal como lo manifestó también el ex vicepresidente del BCRA del gobierno de Macri, Lucas Llach.
Mantener la estrategia de suba de las tasas de interés del Banco Central: posiblemente el organismo que conduce Miguel Pesce decida este jueves otro incremento de la tasa luego de que se conozca el IPC de agosto, para mantener los rendimientos en pesos en un terreno entre neutro y positivo, en sintonía con lo acordado con el FMI y destacado por Georgieva en su comunicado posterior a la reunión con Massa en Washington.
De esta manera, en términos efectivos, el rendimiento se ubicaría cerca del 100%. El equipo económico sabe que, como suele ocurrir, hay un período de rezago hasta que el endurecimiento de la política monetaria tiene efecto sobre la inflación y, a la vez, reconoce el trade off entre esta decisión y su efecto de enfriamiento en el nivel de actividad económica.
Igualmente, cerca del ministro destacan que siempre es preferible estabilizar la macro y hacer un ajuste ordenado antes de que el mercado lo lleve adelante, con consecuencias mucho más negativas tanto para el nivel de precios como para el nivel de actividad, como se observó con la desordenada renuncia del ministro Martín Guzmán a principios de julio.
Aceleración del esquema de “crawling peg” en el mercado cambiario oficial, tal como quedó evidenciado este mes con la nueva estrategia del BCRA y Economía para llevar la tasa de devaluación lo más cerca posible al ritmo de la inflación.
En sentido, las autoridades saben que deben manejarse en un delicado equilibrio entre evitar una situación de atraso cambiario y, a la vez, no echar más combustible sobre el IPC con una depreciación demasiado acelerada.
Todas estas medidas tendrían que generar una ayuda para que los precios no se aceleran más en forma mensual.
Economía reconoce que la inercia es muy fuerte, y por eso apuesta que recién a partir de octubre el número mensual del IPC sea menor al 6% y se consolide en torno del 5% en el último bimestre del año.
En el Palacio de Hacienda admiten que no se trata de un buen resultado, sino del mejor que creen que pueden lograr en 2022: frenar el sendero que muchos analistas creían que podía llevar a una inflación de dos dígitos mensuales e inclusive a una potencial hiperinflación a principios del año próximo.
