“Hoy somos 25 payamédicos en Comodoro. Gracias a la formación en Paya Teatralidad que iniciamos este año, podemos sumar más personas que quieran ser parte de esta actividad. Volvimos a llenar de colores los hospitales y las instituciones que visitamos”, contó Oviedo, quien se formó como instructora en Buenos Aires junto al fundador del movimiento, José Pelucchi.
Actualmente, los payamédicos recorren el Hospital Regional, el Hospital Alvear, CABIN, la Fundación Crecer y próximamente iniciarán visitas en la Clínica Española. “Sumamos cada vez más lugares. Es una alegría inmensa poder acompañar a los pacientes y sus familias. Llevamos risas que sanan”, expresó en diálogo con FM La Petrolera.
Respecto a la formación, Oviedo explicó que el único requisito para ser payamédico es el deseo genuino de serlo. “Siempre les digo que lo fundamental es el deseo y sostenerlo en el tiempo. No se trata solo de ponerse una nariz roja, sino de comprometerse a acompañar desde el respeto y la empatía”.
Sobre la dinámica del grupo, detalló: “Cada encuentro comienza como una ceremonia: preparamos nuestra ropa, verificamos que esté la nariz naranja y nos disponemos a salir con energía positiva. Visitamos hospitales, escuelas y también realizamos paya charlas con alumnos. Es una forma de volver a ser niños y de transmitir alegría”.
Oviedo también remarcó el respeto con el que se aborda a cada paciente: “Si una persona no quiere recibirnos, lo entendemos. Respetamos el no verbal, una mirada o un gesto. Pero muchas veces, al volver a pasar, esa persona se sonríe… y ahí sabemos que logramos conectar”.
Con humor, Lidia contó que los payamédicos también llevan su alegría a las calles y eventos de la ciudad: “Hoy estamos en el Regional, después en CABIN y Fundación Crecer, y a la tarde haremos una paya costanera, caminando por la Ducós y saludando a todos”.
Finalmente, invitó a quienes quieran sumarse: “El año que viene abrimos tres cursos de formación en paya teatralidad. En enero estaremos inscribiendo. Quienes tengan interés pueden buscarnos en redes como Payamédicos Comodoro Rivadavia o contactarse conmigo, Lidia Oviedo, a través de mis páginas”.
“Ser payamédico —concluyó— es elegir mirar la vida con ternura, respeto y una sonrisa. Donde hay dolor, nosotros llevamos color.”
