El joven de 19 años fue muy honesto al contar su historia en la casa de Gran Hermano y este viernes su familia le abrió las puertas de su hogar al público.
Thiago Medina, de 19 años, emocionó al público con su historia de vida al ingresar a la casa de «Gran Hermano». Entre otras cosas el muchacho recordó a su madre, que falleció cuando él tenía 8, y habló sobre su familia y su lucha por salir adelante.
«Me emociona que nos mencione siempre y justo ayer lo estaba extrañando«, contó este viernes Brisa, la melliza de Thiago, en un móvil con el programa «LAM» desde su casa en González Catán, provincia de Buenos Aires.
Brisa estuvo acompañada por otra hermana de Thiago y el papá de todos, que también tuvo palabras amorosas para el muchacho: «Se está comprando a todos los argentinos porque por lo que veo lo siguen todos todo el tiempo, la gente me reconoció y me paró en la calle para felicitarme con él», comentó el hombre.
«Vivimos en una casa humilde, pero es lo que hay y con mucho orgullo», sentenció el padre de Thiago desde su hogar desde hace 24 años en la provincia de Buenos Aires.
Thiago y sus hermanas trabajan en el Mercado Central. «Yo sé lo que es levantarse a las cuatro de la mañana, tener frío, hambre, volver empapada», comentó una de las jóvenes.
«Como siempre se lo dije, prefiero que se rompa el lomo laburando y en el Mercado tenés el que te trata bien y el que te trata mal. ¿Sabés lo que es ver a tu hermano carreterar, eso es ganarse la vida, para traer un mango? Y las veces que dijo que no daba mas. El labura bien, mucho, el lomo que tiene, es de trabajo desde chico y verlo ahí me emociona«, agregó la joven sobre el paso de Thiago por «Gran Hermano».
«Antes de morir, mi vieja me dijo: ‘vergüenza tenés que tener cuando salís a robar’, y le hice caso, nunca salí a robar«, contó Thiago en su presentació en el reality show de Telefe, una muestra de la entereza de toda la familia.
«No me da vergüenza este lugar, es donde nos criamos, nos unió el fallecimiento de mi mamá, fue duro porque lloramos y caigo y nos caemos todos. El otro día Brisa me dijo: ‘extraño a mamá’, y siempre nos unió el amor de hermanos. Hace diez años que no tenemos mamá, y es duro, mi mamá falleció cuando mi hermanita tenía ocho días de vida», contó la mayor de los hermanos.
Por ahora Thiago «no está jugando» en la casa más vista del país, según su explicó su melliza, sino que está disfrutando de las instalaciones, que son muy distintas a las de su hogar en González Catán.
«Thiago es tal cual lo ves ahí. Siempre nombra a sus hermanos y estoy contento por él, que lo disfrute y ojalá le vaya bien, porque es un buen pine, lo quiere todo el mundo y yo lo amo», contó su papá con orgullo.
