En Chubut, una transformación profunda y silenciosa está en marcha: el sistema de adopciones atraviesa un proceso de fortalecimiento que busca garantizar a niños, niñas y adolescentes el derecho a crecer en un entorno familiar lleno de afecto y estabilidad.
En los últimos meses, se concretaron cinco adopciones plenas y actualmente se gestionan 20 guardas preadoptivas, de las cuales la mitad ya avanzó hacia la instancia judicial. Esta evolución se enmarca en el trabajo articulado que impulsa el Ministerio de Desarrollo Humano de la provincia, bajo la conducción de la ministra Florencia Papaiani.
Durante una reciente reunión con la directora general de Adopciones, Sandra Papania, y la directora del área, Julieta Lastoria, se analizaron avances, desafíos y proyecciones en torno a la política adoptiva, con especial atención en lo que ocurre en las delegaciones de Trelew, Puerto Madryn y Comodoro Rivadavia.
Abordaje territorial y mirada individual
El enfoque adoptado por Chubut pone el acento en el acompañamiento personalizado de cada caso. La provincia trabaja sobre un modelo que combina presencia territorial, escucha activa y seguimiento sostenido, especialmente en situaciones complejas que involucran a niños alojados en dispositivos de cuidado.
“Estamos muy contentos con los resultados que venimos alcanzando. Cada adopción concretada implica no solo una nueva familia, sino una historia de amor y compromiso que comienza a escribirse”, expresó la ministra Papaiani, quien valoró el compromiso de los equipos técnicos distribuidos en todo el territorio provincial.
Por su parte, Sandra Papania subrayó que el trabajo continúa con la misma convicción: “Cada niño y cada adolescente merece una familia que le ofrezca amor y seguridad. Por eso abordamos caso por caso, con sensibilidad, responsabilidad y dedicación”.
Un cambio cultural en construcción
El fortalecimiento del sistema de adopciones en Chubut no solo implica números o estadísticas. Representa, sobre todo, una apuesta a construir un presente más justo para quienes esperan una familia. Y también, un futuro con oportunidades reales para crecer rodeados de cuidado y afecto.
