Le inquieta la existencia de los casi nueve meses de transición que existirán entre las elecciones de marzo y la asunción de nuevas autoridades en diciembre, sobre todo en caso de que resulte ganadora una fuerza que no sea la que actualmente gobierna.
El presidente de la bancada radical en el Concejo Deliberante de Comodoro Rivadavia, Jorge Camarda, manifestó ayer en el diario El Patagónico su preocupación por el panorama político institucional que se abre para este año, atravesado por las elecciones que se celebrarán el 20 de marzo a nivel provincial y municipal.
En tal sentido, reiteró las mismas argumentaciones que había vertido en el recinto del Concejo durante la sesión del año pasado en la que se dio tratamiento a la adhesión al decreto provincial que convocaba a comicios para el 20 de marzo y que la UCR no acompañó.
En ese momento, Camarda había puesto de manifiesto las implicancias políticas de nueve meses de convivencia entre gobernador, intendente y concejales en ejercicio y electos, considerando el adelanto de las elecciones para marzo, en lugar de octubre y la asunción de las nuevas autoridades recién el 10 de diciembre próximo.
“No quiero pensar lo que puede llegar a ocurrir si los que ganan no son de la línea política que hoy está en funciones” dijo, al señalar que actualmente ya son visibles las serias dificultades en el interior del Concejo, en relación a las discusiones por la presidencia del bloque PJ entre dasnevistas y kirchneristas; las titularidades de las comisiones y la línea sucesoria de autoridades del cuerpo.
TRANSICION
“Todo esto va a generar un sinnúmero de dificultades que no han sido evaluadas”, advirtió al poner en primer plano la preocupación por la institucionalidad y la manera en que resolverá el Concejo como institución los problemas dados por un eventual conflicto interno del PJ y por un hipotético conflicto de mayor fuerza si el ganador resultara otro partido, como la Unión Cívica Radical.
“A quien gane esta elección habrá que pedirle reflexión, serenidad, debate e institucionalidad”, expuso Camarda, al indicar que si bien un sector puede ganar o perder las elecciones debe priorizar ese aspecto, en función de que la Intendencia seguirá necesitando normas importantes.
“Todo esto me genera una gran preocupación, ojalá, equivocadamente”, dijo, aunque basándose en su experiencia política citó que no hay nada peor que las luchas intestinas, y si bien restan pocos días para el 20 de marzo, el conflicto podría darse después, en los largos nueve meses que disten entre esa fecha y el 10 de diciembre.
Camarda trasladó los mismos términos de su análisis a la esfera provincial, donde distinguió rasgos de intolerancia y agresividad en la campaña, sobre todo en los sectores del PJ, y aunque como radical subrayó que no pretende inmiscuirse en la interna ajena.
De todos modos, reiteró su mirada de preocupación sobre ese contexto. “Espero estar equivocado, pero eso será difícil, Me parece que 2011 va a ser muy complicado porque las dificultades son serias: pasar de una mayoría abrumadora a una probable atomización legislativa, me preocupa y mucho”, consideró.
