El Xeneize y el Matador se verán las caras en el Mario Alberto Kempes con la ilusión de conquistar el torneo doméstico.
Boca irá en busca de una nueva estrella para su escudo ante un rival peligroso como Tigre que intentará generar otro “batacazo” como sucedió hace tres años ante los Xeneizes y 10 días atrás frente a River Plate, esta vez en la final de la Copa de la Liga a jugarse en Córdoba.
La definición que consagrará al primer campeón a nivel doméstico del año se jugará a partir de las 16, en el estadio Mario Alberto Kempes, será arbitrado por el neuquino Darío Herrera y televisado por ESPN Premium. A cargo del VAR estará Mauro Vigliano y si el partido finaliza igualado al cabo de los 90 minutos, habrá tiempo extra de 30 minutos para definir al campeón, aunque de persistir la igualdad se recurrirá a definición con remates desde el punto de penal.
El equipo dirigido por Sebastián Battaglia asumirá su primera final del semestre, con la gran recompensa de que si gana obtendrá el título y la clasificación para la Libertadores de 2023, mientras que la segunda será el jueves próximo en La Bombonera ante Deportivo Cali, al que necesitará vencer para avanzar a los octavos de final de la actual edición de la competición internacional.
Tigre, por su parte, fue cuarto en el mismo grupo que los Xeneizes y en los mano a mano eliminó a River y Argentinos Juniors, mientras que ante Boca jugó por última vez en la última fecha de la zona y perdió en Victoria por 2-0 con goles de Darío Benedetto y Luis Vázquez.
Se presume que será una final de desarrollo parejo, porque Tigre es un equipo trabajado y Boca tiene experiencia en partidos decisivos, además de la jerarquía individual. En total, ambos equipos se enfrentaron en 78 partidos oficiales, con 51 victorias de los “Xeneizes” contra 14 del “Matador” y 13 empates.
La final promete un marco espectacular en las tribunas del estadio cordobés, con 52.000 hinchas y entradas agotadas, 35 mil por el lado de Boca y 17 mil para los de Tigre.
