Lo anunció el canciller Héctor Timerman. Argentina irá a la Corte de La Haya en el marco de la situación planteada con la ex Botnia, luego de que el presidente José Mujica autorizara a la compañía a incrementar su producción, lo que implicó una ruptura unilateral del acuerdo entre ambos países.
«La Argentina lamenta que los intereses de la empresa se hayan convertido en un factor determinante en la relación entre Uruguay y la Argentina”, sostuvo Timerman en la declaración que realizó esta tarde en la Casa Rosada junto al gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri.
Al hablar en la Casa de Gobierno, Timerman precisó que en la reunión que mantuvo ayer con el canciller uruguayo Luis Almagro, Argentina “solicitó seguir dialogando y no caer en la lógica del enfrentamiento que sólo beneficia a UPM, pero Uruguay no respondió”.
“Hoy, habiendo Uruguay roto el diálogo unilateralmente, la Argentina se encuentra liberada de la obligación de anunciar conjuntamente los informes científicos” referidos al nivel de contaminación del río Uruguay provocado por UPM, destacó el jefe de la diplomacia argentina.
Además, señaló que de las 21 preguntas formuladas por la Argentina para solicitar información con el objetivo de poder analizar el pedido de aumento de la producción, hubo 11 que quedaron con respuestas incompletas o sin responder.
“El pedido de respuestas fue reiterado en cuatro oportunidades”, indicó Timerman, quien agregó que “de la misma forma que nos hemos propuesto accionar respecto de los fondos buitre, impediremos ser doblegados por una empresa transnacional”.
En el mismo tramo de su alocución, el canciller destacó “el esfuerzo de Cristina Fernández de Kirchner para lograr el levantamiento del corte del acceso” entre Argentina y Uruguay.
De esta manera, ante el fracaso de las negociaciones entabladas con el Uruguay, «el Gobierno argentino resolvió recurrir ante la Corte Internacional de La Haya por la decisión unilateral del vecino país de permitir el aumento de producción de la planta UPM Botnia», resumió Timerman.
A la vez, sostuvo que la resolución del gobierno uruguayo “viola los tratados entre ambas naciones y la propia sentencia de la Corte Internacional de La Haya” y por ello se resolvió “recurrir” ante ese organismo jurídico internacional.
La decisión de Uruguay “afecta la soberanía ambiental de la Argentina”, remarcó el canciller.
