El presidente del club mantuvo una cumbre con los futbolistas y les pidió poner fin a las peleas internas y no brindar detalles de lo que sucede en el vestuario. El dirigente por ahora no se expresó públicamente sobre el conflicto.
Daniel Angelici apareció en Casa Amarilla para tratar de llevar calma en el medio de la tormenta interna. El presidente de Boca habló con los jugadores, les pidió que corten con las peleas, avisó que puede haber sanciones si hablan del escándalo públicamente y les aclaró que están dañando la imagen del club.
El «Tano» pisó fuerte en La Boca e hizo un pedido claro. No quiere que se sigan filtrando las cosas que pasan el vestuario. Los últimos hechos en el mundo «xeneize» molestaron a la comisión directiva y, en especial, al presidente. La conferencia de Pablo Ledesma, la violenta reacción de Agustín Orion y el escándalo mediático le cayeron muy mal Daniel Angelici.
Lejos de la realidad, Riquelme dijo, en el último encuentro ante Racing, que adentro del plantel «no pasa nada». La visita del máximo responsable del club parece contradecir los dichos del capitán. En Boca pasan muchas cosas y una de las más importantes es que no juega bien después de un año con Bianchi sentado en el banco.
Angelici también les llevó un pedido a los jugadores. Quiere que se levante la decisión que tomó el plantel de no hablar más con la prensa. Es decir, quiere que la vida del mundo Boca vuelva a encarrilarse por el camino de la normalidad.
El conjunto del «Virrey» enfrenta a Argentinos el próximo domingo en la Bombonera. El entrenador piensa cómo armará el equipo debido a que Fernando Gago y Emanuel Insúa no serán de la partida. Ambos llegaron a la cuarta amarilla. En su lugar ingresarían al equipo titular Luciano Acosta y Nahuel Zárate.
Hoy se volvieron a ver las caras Ledesma y Orion después de la pelea del último viernes. A la dirigencia «xeneize» no le gustó la actitud de ninguno de los dos. Ni los dichos del volante cordobés en conferencia de prensa ni la reacción violenta del arquero. Por eso hoy Angelici intentó imponer su voz de mando en el vestuario y parar el escándalo interno que se ventiló la última semana.
