La empresa de capitales rusos respondió a una información -a la que calificó de “malintencionada” por parte de Frigorífico Esquel- que hablaba de un embargo de 7 millones de pesos. Pero dice que la intención es apropiarse de su mercadería, destinada a la exportación.
A raíz de informaciones periodísticas -que Flexymar calificó de “malintencionadas” por parte del Frigorífico Esquel- en las que se argumentaba que existía un embargo por parte del Frigorífico Esquel a Flexymar por siete millones de pesos, ayer se conoció un comunicado de prensa, donde la empresa de capitales rusos expone que no existe dicho embargo y que, en todo caso, hay una retención ilegítima de la mercadería.
Uno de los principales puntos expuestos por Flexymar, señala que no hay ningún embargo de la mercadería de Flexymar y que el Frigorífico Esquel retiene ilegalmente desde el 1º de junio de este año, 204.838.73 kilos de carne ovina; 11.215,85 kg de despojos ovinos; 5.930 carcasas ovinas y 238 cabezas de ganado, además de fardos de cuero, computadoras, balanzas, máquinas envasadoras de vacío, que pertenecen a Flexymar.
“Ese día, Flexymar devolvió la posesión al frigorífico quedando en las cámaras e instalaciones del Frigorífico Esquel la mercadería mencionada con anterioridad y que consta en el acta notarial suscrita por el escribano Dr. Rafael De Bernardi y firmada por Luis Fernández como apoderado de Frigorífico Esquel”, dice el comunicado.
Y agrega: “Desde entonces, Frigorífico Esquel se niega a entregar la mercadería que iba a ser destinada para la comercialización en el país y para la exportación a Rusia. Esto ocasionó incumplimiento de contratos, enormes perjuicios y pérdidas para empresa, los trabajadores y los productores de la zona y de otras regiones”.
El fiscal general, Martín Eduardo Zacchino -sostiene Flexymar- entendió que la retención de la mercadería, sin ninguna orden judicial que lo justifique, configuraría un “accionar (presuntamente) delictivo”, que podría constituir “una defraudación por retención indebida” y pidió al Juez de Garantías la restitución inmediata de la misma, habiendo cuenta de que se trata de un producto perecedero como la carne.
“El embargo decretado el 25 de junio, aún no ha sido ejecutoriado ni efectivizado por el juez Magallanes a través de los mecanismos legales correspondientes. Es por eso que durante estos 45 días, Frigorífico Esquel ha retenido ilegalmente mercadería perecedera, con fecha de vencimiento y propiedad de Flexymar S.A”, añadió.
Tal embargo, según expone Flexymar, ha sido pedido por la casi totalidad del valor de la mercadería, 1.381.536 dólares. “Se llega a esa cifra fantástica con facturas de numeración sucesiva y planillas contables sin ninguna documentación de respaldo, lo cual demuestra que se trata, para Flexymar, de intento de Frigorífico Esquel para apropiarse ilegalmente de toda la mercadería”.
“Por esto, Flexymar ha solicitado la revocación del embargo preventivo decretado, y además se ha presentado toda la documentación donde se demuestra la falsedad de las deudas dibujadas por Frigorífico Esquel”, sostiene.
Según el comunicado de prensa, “hay contratos y acuerdos entre Frigorífico Esquel y Flexymar que podrían resolverse con una negociación de por medio. Más teniendo en cuenta que se venía negociando la compra de dicho establecimiento, ya que los dueños del Frigorífico Esquel desde hace años quieren cerrar, y Flexymar está muy interesada en continuar con la explotación del mismo, en vista de las enormes posibilidades comerciales abiertas por la exportación a Rusia y mantendría una fuente de trabajo muy importante para Esquel”.
Por ello, y tal cual lo indica Flexymar, “se ha ofrecido depositar ante el juzgado una caución de 404.423,50 pesos, monto que surge de certificación contable”.
“Todo esto se ha visto agravado –explica la empresa- por el hecho de que nuestro apoderado hasta el 1º de junio, el Dr. Raúl Vila, es a la vez apoderado de Frigorífico Esquel, y en ese carácter, inició dos juicios en nuestra contra, delito por el cual también está siendo investigado”.
Flexymar, en el comunicado de prensa, alude a que las autoridades de Frigorífico Esquel “han abandonado la ciudad”. “El señor Luis Fernández, que operó en los hechos como gerente, abandonó la ciudad. Esto refleja -según Flexymar- el desinterés de la familia Chornik (dueños de Frigorífico Esquel)”.
En tanto que Flexymar, por el contrario, informa que sus autoridades “se encuentran presentes, visitando a las autoridades municipales, en los juzgados, y atendiendo los reclamos de los productores afectados y de los trabajadores”.
Para finalizar, desde Flexymar reiteraron la importancia de “recuperar” la mercadería y les pidieron a las autoridades de los distintos poderes del Estado -Ejecutivo, Legislativo y Judicial- que tomen que tomen cartas “en un asunto que trasciende al interés de toda la comunidad de Esquel”.
Fuente: Jornada
