“Tengo terror de volver a mi casa”, revela una damnificada de Km 17

Los vecinos de Kilómetro 17, Antonio González, Ricardo Toledo, Hugo Serna, Mario Miranda, Marcelo Alba y Daniel Quevedo son héroes anónimos. Es que durante la tarde del miércoles rescataron a una mujer que se hallaba…

viernes 15/04/2011 - 12:00
Compartí esta noticia



Los vecinos de Kilómetro 17, Antonio González, Ricardo Toledo, Hugo Serna, Mario Miranda, Marcelo Alba y Daniel Quevedo son héroes anónimos. Es que durante la tarde del miércoles rescataron a una mujer que se hallaba en su casa junto a sus tres hijos, con un metro de agua en el interior.

El agua ya le llegaba a la cintura a María de los Angeles Quevedo junto a sus tres hijos menores, uno de ellos con problemas de asma, cuando el rescate llegó de los propios vecinos.

Llegaron al rescate de María. Prácticamente nadando debieron desplazarse desde el ingreso del predio hasta la vivienda. Entraron por una ventana de la casa y a fuerza de brazos sacaron a los niños junto a su madre. La mujer se encontraba sola debido a que su marido está de viaje en Buenos Aires por trabajo.

“Fue un metro de agua”, todavía se sorprendía ayer González y señalaba el límite de la humedad en la pared de la casa. “Hasta la ventana llegaba, tuvimos que manotear a los chicos y sacarlos. Nunca habíamos pasado esto. No se hizo presente nadie, llamamos a Defensa Civil y la Cooperativa”, cuestionó González.

En ese momento “nos sentimos abandonados, pero la peleamos”, contaron. “Le ganamos a la fuerza, al agua. Tirábamos tierra con pala y llenamos bolsas para frenar la entrada a la puerta de la casa”. La pelea contra el agua fue cuerpo a cuerpo. La solidaridad fue tomarse la mano uno con uno, todo por salvar a los niños de la Quinta “Los Menducos”.

“Le doy gracias a Díos y a mis vecinos que mis hijos están vivos, las pérdidas han sido materiales nada más” dijo María de los Angeles. Los vecinos ayer con una bomba trataban de desagotar el predio cuando en Kilómetro 17 todavía continuaban aislados.

“Mas allá de que cada organismo está con su tarea, somos seres humanos” sostuvo la mujer llorando al observar su casa. “No sé si voy a poder volver a vivir en mi casa. No sé qué voy a hacer”, confesó. Es que el cielo nublado y con posibilidades de nuevas precipitaciones la asustan. “Fue un día horrible”, aseguró.

Los terrenos todavía esperan por las mensuras. Pero un gran número de familias construyeron y viven hace más de dos o tres años allí. La mayoría son mendocinos. Todos tratan de ayudarse.

Ayer Laura Morales, una vecina con cuatro hijos, se acercó hasta la chacra de los Quevedo y preguntó “¿ustedes son de Defensa Civil?”. “No somos de Diario Patagónico”, le respondieron los periodistas.

Es que la mujer esperaba la llegada de los rescatistas a su casa donde el miércoles perdió todo a causa de la lluvia. Dijo que no tiene colchones porque están todos mojados, ni ropa para sus cuatro hijas y mostró cómo duermen con varias frazadas amortiguando el cuerpo.

Stella Maris Molina, también perdió prácticamente todo lo que poseía. Tiene una bebé de dos meses muy resfriada y cuatro niños. Ayer pedía si las autoridades le podían acercar alguna estufa a leña, colchones o frazadas.

Fredy Ojeda junto a su esposa y su hija de 3 años también continuaban aislados. “Fue terrible. Yo estaba en el campo, mi señora estaba sola con mi hija y su mamá. Perdimos todo adentro de mi casa porque se me inundó todo”, lamentó Ojeda con una pala en la mano. Es que las calles en esa barriada estaban totalmente anegadas y la Vecinal está cerrada con candado.

(El Patagónico)

Compartí esta noticia