Así explicó el Secretario General del Sindicato del Petróleo y Gas Privado del Chubut, Jorge Ávila, los fundamentos de la medida de fuerza convocada por los gremios petroleros de toda la Argentina, indicando que no están claras las garantías laborales, ya que mañana era la reunión clave para descomprimir la situación o directamente pasar a un plan de lucha, y la misma fue pospuesta para el martes que viene.
“No estábamos en condiciones de pasar otra semana más sin arreglar salarios y decidimos entre todos los Secretarios Generales presentes un paro por 48 hs. desde el lunes a las 0 hs.”, dijo Ávila de la decisión conjunta tomada con José Llugdar de los Petroleros Jerárquicos de la Patagonia Austral, Claudio Vidal del sindicato de base santacruceño, Guillermo Pereyra de la cuenca neuquina y Julián Matamala, de los Jerárquicos de Cuyo y La Rioja.
Y agregó que esto se da en defensa de los puestos laborales y el salario, alertando la necesidad de hacer un plenario de Comisión y Delegados el día sábado en horas del mediodía para determinar los pasos a seguir “porque Acá hasta los empleados de las operadoras saben que su fuente de trabajo está en riesgo”.
“No hay que andar apurando a nadie. Esto es un compromiso entre los trabajadores y nosotros. No estamos haciendo locuras. Hemos pedido aumentos salariales de acuerdo a cómo está la industria, a cómo están los salarios de nuestra gente. Ellos en la mesa presentaron una discusión de ocho horas, les dijimos que sí pero que eso iba también en la salarial”, agregó ‘Loma’.
En ese marco, señaló en dialogo con El Comodorense Radio por FM La Petrolera 89.3 MHz que más allá de eso, “hoy la actividad esta parada en varios aspectos porque se está permitiendo la exportación de crudo en todos los puertos argentinos y la de gas desde países que ni siquiera son productores como Chile, y nosotros el petróleo y le gas los seguimos dejando bajo tierra”.
“Después dicen que todos los aumentos que hay son para defender la industria y cuando vamos a los puestos laborales, no lo justifican. Eso hizo que tomemos las decisiones que tomamos en defensa de lo salarial, puestos de trabajo y la economía regional. Porque nos encontramos con la pequeña y mediana empresa muchas de ellas económicamente asfixiadas porque se les ha pedido un achicamiento de tarifas en 2015 y otro en 2016, donde quedan un montón de empresas que no van a poder hacer frente al salario ni al aguinaldo”, analizó Ávila.
Del mismo modo, enfatizó que “este es un problema que agrava la situación y va a poner mayor conflictividad a la zona. Ante esos agravantes, tomamos la decisión de parar 48 horas a partir del día lunes. Porque no hay una política de energía nacional, está claro eso. No hay un ministro que pueda venir a decir cuáles son los planes de inversión. Nos dicen que no hay puerto en la Argentina para que entren importaciones, y al ver que en lo que va del año entraron 6 o 7 barcos a descargar petróleo, creemos que eso es tomarnos el pelo. O que no se produce más gas por los costos y lo compran al doble de lo que lo compran los propios argentinos en el WTI, entonces nos damos cuenta que no hay un criterio a la hora de definir los destinos de una energía tan estratégica como son los combustibles en el país”.
Por otra parte, comentó que con Pecom aceptaron una conciliación, agradeciendo a los Trabajadores la confianza demostrada en esto. “Vamos a sentar un antecedente, porque por primera vez en una transferencia de personal vamos a hacer una discusión, dura como todas, pero tenemos grandes esperanzas de lograr la indemnización y la discusión general que tenemos de ver dónde queda la plata prevista por la industria a la hora de despedir gente”.
La unidad de los gremios en el posicionamiento
Acerca de esa particularidad, Ávila dijo que es algo que se ha logrado dentro del trabajo de una mesa de discusión en la que todos han puesto su análisis, coincidiendo plenamente en que la discusión pasa por ver el que se hagan ocho horas, pero manteniendo toda la industria. “Si no lo pueden garantizar, ¿entonces para qué vamos a hacer ocho horas?” -se preguntó-.
Y sentenció que no hay nada que diga que esto va a mejorar o empeorar. “Si uno analiza el discurso del CEO de Energía (el ministro Juan José Aranguren) de ayer, ni siquiera sabe el rumbo que ha tomado la industria, no se da cuenta que ha habido una devaluación, que los tarifazos repercuten en el bolisllo del Trabajador, que el aumento de los combustibles era para mantener la industria y no para traer lo de exportación. Porque si lo hacen, por lo menos hubieran bajado las naftas. No hicieron nada de eso y quieren justificar este tema con la mayor cantidad de trabajadores haciendo ocho horas, pero a su vez trayendo barcos de petróleo que han comprado afuera antes que el barril suba su precio”, lamentó.
Paralelamente, en la jornada de jueves en Buenos Aires se desarrollaron reuniones por los conflictos de Manpetrol, Tuboscope y Copgo GE “tratando de encontrar una salida que en definitiva nos brinde la oportunidad de sacar todos estos conflictos de la región y quedarnos con un solo conflicto grande, que es la mantención de los puestos laborales y la defensa del salario”, indicó.
El paro
“El trabajador que sube, que suba. No tiene que tener miedo ni nada. Estamos bajo una conciliación obligatoria, no hay que olvidarlo, pero es un paro general y no tenemos miedo de afrontar una confrontación en defensa de los puestos laborales y del salario del trabajador. Sé que va a haber muchos pícaros que van querer sacar provecho de hasta subir a escondidas a laburar. Son los mismos que dicen que opinan de las ocho horas pero en las mesas de discusión no los vas a tener porque no saben ni cómo discutirlo”, advirtió ‘Loma’.
Y dijo que el paro la gente lo va a acatar no por los dirigentes gremiales, sino porque defienden su salario, su familia, su fuente de trabajo, su ingreso, la provincia y la región. “El trabajador es consciente de todo lo que pasa a nivel país porque se informa y sabe en el proceso que estamos. Entonces, los dirigentes estamos en segunda línea y cuando llegue el momento iremos a las elecciones. Repito: no vamos a pactar con ninguna lista ni hacer de dos listas una. Vamos a morir con la azul, tenemos suficiente gente para prestarles si a ellos les falta. Y prefiero el acompañamiento de los trabajadores y no el de los dirigentes”, concluyó Ávila.
