Bulevares y plazas en mal estado y con falta de riego son la conclusión lógica de una ciudad donde la aridez natural de la zona y la constante falta de agua, dificultan la subsistencia de espacios verdes en la ciudad de los vientos, un hecho por el que los comodorenses suelen renegar cada vez que anhelan un poco de vegetación para disminuir el calor o simplemente para admirar visualmente.
Las características del suelo, en su mayoría arcilloso o con cantidades considerables de salinidad, complican la proliferación de vegetación, aunque con mucho trabajo se ha logrado contar con algunos espacios de recreación.
Principalmente en la zona céntrica y en Km 3 existen plazas, parques y bulevares cuidados, con césped, árboles, luminaria, bancos y juegos infantiles según el caso. Por el contrario, en el resto de la ciudad hay pocos espacios que se conservan y la gran mayoría se encuentra casi en estado de abandono, con árboles secos, escasa o nula vegetación, falta de pintura y mantenimiento general.
Agua para riego
El problema principal es la falta de agua. Tratándose de espacios verdes, lo mejor sería disponer de un sistema de tratamiento y recuperación de aguas servidas para utilizar en riego, como sucede en la villa Rada Tilly. De otra manera, se debe disponer del agua de red para mantener estos espacios, y esa es la principal razón por la cual el agua para regar se raciona y se recomienda utilizar el sistema por goteo para economizar el recurso.
Ya en el año 2000, se predecía un futuro distópico en el que la ciudad más poblada de la provincia quedaría desprovista del suministro de agua debido al bajo caudal de los lagos Musters y Colhué Huapi, publica hoy el diario Crónica.
En ese entonces las razones de las bajas fueron una prolongada sequía, el riego excesivo y el uso irracional que hacían los productores. Actualmente el lago Colhué Huapi perdió gran porcentaje de agua debido en parte a la evaporación y al abastecimiento humano.
Vecinos a la obra
Algunos espacios públicos fueron refaccionados y son cuidados por los mismos vecinos que sin intereses de por medio se abocan a la tarea de mejorar espacios para la comunidad.
Ejemplos de compromiso ciudadano son la Murga Batucada Comodorense, que en 2013 instaló de manera voluntaria juegos para niños en la plaza ubicada en el boulevard de Avenida Rivadavia, entre Martín Fierro y Las Orquídeas, lindero al espacio donde realizan sus prácticas. El jueves último la murga se reunió para pintar los paredones que circundan el perímetro de la plaza con colores, dibujos y leyendas alusivas, ideas propuestas por la madrina de la murga Veroka Velázquez.
Asimismo en las 1008, en noviembre del año pasado un vecino encabezó la creación de la plaza “Princesita Yasmin” en homenaje a Yasmín Chacoma, donde instaló juegos y bancos, con la intención de continuar dotando al espacio de árboles y otros elementos.
Estos son sólo dos ejemplos de muchos otros que se prologan en los diferentes barrios de la ciudad, que por estar alejados del casco céntrico muchas veces son relegados junto a sus espacios de recreación y esparcimiento.
