El diputado nacional Mario Das Neves hizo declaraciones en Buenos Aires referidas al Presupuesto Nacional 2015 que el gobierno pretende aprobar, señalando que una vez más se intenta perjudicar a Chubut.
Uno de los puntos observados por el exgobernador es en lo ateniente a Vialidad Nacional, donde 5 provincias kirchneristas (Bs. As., Chaco, Santa Cruz, Formosa y Entre Ríos) se quedan con el 70% de los $2.448 de millones de gasto en transferencia para obras. El resto se divide entre las otras 18 provincias restantes.
Algo similar ocurre con los planes que tiene el Ministerio de Planificación Federal para cubrir el déficit habitacional. El 19% de estos recursos se destinan para Buenos Aires por $3.401 millones (1400 millones más que en 2014). Le siguen Mendoza ($1.807 millones), Chaco ($1.590 millones), Entre Ríos ($1.054 millones), San Juan ($923 millones), Tucumán ($877 millones) y en tanto que el resto, incluida Chubut, está por debajo del $800 millones.
Números inexplicables
Das Neves remarcó que “hay números que son inexplicables. Por ejemplo, dentro de las obras plurianuales, el monto total de la cuarta etapa de la ampliación del puerto de Comodoro Rivadavia, según el presupuesto 2014 costaba unos 250 millones y en este presupuesto el monto total de obra se indica por 500 millones.
Das Neves aseguró que “estamos poniendo la lupa en las obras que son para Chubut. Nos comunicamos con todos los intendentes para que nos indiquen cuáles eran las obras de mayor importancia, y estamos estudiando la información que nos enviaron”.
“Ni el gobernador Buzzi, ni los legisladores de frente por la victoria de Chubut parecen estar enterados de este asunto. Nuevamente hacemos un llamamiento para que expresen su postura públicamente respecto a este presupuesto que discrimina a Chubut y a otras provincias no oficialistas”.
“Este presupuesto prevé una inflación anual del 15% y un dólar inexistente. Es poco serio. Si yo les pregunto a ustedes si creen que la inflación anual es del 15%, se me ríen en la cara. Acá debemos, primero, aceptar la realidad, y después discutir cómo se va a financiar la Argentina a partir del año que viene.
El sistema tributario se sigue alimentando de impuestos injustos, como el IVA, que pagan en la misma medida el pobre y el rico. No puede ser que el 15% de la recaudación nacional provenga de impuestos distorsivos como el impuesto al cheque, que debería ser coparticipado con las provincias hasta que, gradualmente, se llegue a eliminar. Es inviable que el estado nacional se quede con el 73% de la torta y a las provincias se les reparta el resto”.
