El ministro de Energía de la Nación, Juan José Aranguren, destrozó al CEO de YPF, Miguel Galuccio, en la reunión con los senadores nacionales de Cambiemos, y preparó el terreno para echarlo de la petrolera en abril.
La reunión entre Aranguren y los senadores, en las oficinas del bloque radical, tenía como objetivo central conseguir respaldo político para el tarifazo a la luz y el gas, pero el ministro aprovechó la oportunidad para cuestionar duramente la situación financiera de YPF.
La jugada de Aranguren contra Galuccio se completó con un par de tuits del presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, para dar a conocer las críticas sobre la situación de YPF, que no habían sido parte de la información que se dio sobre la reunión.
La salida de Galuccio de YPF era una fija con la llegada de Mauricio Macri al gobierno, pese al acercamiento que había intentado el ejecutivo el año pasado. A diferencia de otras aéreas, el oficialismo le dio un poco más de tiempo al CEO de YPF, aunque todo indica que ese tiempo finalizará en abril, cuando se realice la asamblea anual extraordinaria del directorio.
La principal razón para esa salida es la mala relación de Galuccio y Aranguren, ex CEO de la petrolera Shell. El ministro de Energía hasta ahora aceptó compartir con el ejecutivo designado por Cristina Kirchner, pero lo rodeó en el directorio con especialistas críticos de su gestión, como el ex secretario de Energía Emilio Apud, nombrado en diciembre en el cargo de director que ocupaba Axel Kicillof.
Aranguren también metió como director al ex secretario de Energía y ex presidente de YPF Daniel Montamat, otro feroz crítico de la gestión Galuccio. Además, ingresaron Carlos Felices, ex presidente de Telecom Argentina, y Miguel Gutiérrez, ex titular de Telefónica Argentina y candidato a ocupar el lugar de Galuccio.
Las críticas de Aranguren en el Senado podrían completarse con el informe de un comité de auditoría conformado en diciembre para revisar los números de la gestión kirchnerista. Ese comité está integrado por Felices, Montamat y Gutiérrez.




